Los
videojuegos son una herramienta dedicada al ocio, pero ya llevan tiempo aplicándose en entornos no lúdicos. Actualmente, algunas empresas valoran ciertas habilidades que pueden mejorar tras las sesiones de juego.
Startups como xBadges han decidido investigar la
relación entre videojuegos y competencias. Su objetivo es comprobar de qué manera estos productos pueden mejorar las capacidades de los profesionales. De este modo, se dejan de lado métodos tradicionales para para pasar a explotar la productividad a través del ocio.